Las personas buscamos oportunidades para expresar nuestras emociones, ya sean de felicidad, alegría, cólera, miedos y hasta frustración; y el fútbol es una gran oportunidad para liberar todo esto. Por ello, muchos consideran al "deporte rey" como una "terapia emocional".
" El fútbol genera un aprendizaje emocional muy enriquecedor. El fútbol puede llevar a la felicidad más grande como a la pena más intensa; sin embargo, después de eso,volvemos a creer y volvemos a ilusionarnos, creemos en una nueva oportunidad de ver a nuestra selección triunfar y eso nos hace felices".
El triunfo de la selección de un país puede impactar favorablemente en la salud emocional del colectivo.
" El fútbol genera un aprendizaje emocional muy enriquecedor. El fútbol puede llevar a la felicidad más grande como a la pena más intensa; sin embargo, después de eso,volvemos a creer y volvemos a ilusionarnos, creemos en una nueva oportunidad de ver a nuestra selección triunfar y eso nos hace felices".
El triunfo de la selección de un país puede impactar favorablemente en la salud emocional del colectivo.
La psicología destaca la magia del fútbol, que conforma una
comunidad y crea una identidad. Si bien el fútbol no resuelve problemas, puede
llegar a ser una muy buena terapia social.
Para Castillo, el fútbol es una metáfora de nuestra propia vida, pues siempre estamos luchando, en competencias pero a la vez cooperando con el próximo. Siempre tratamos de salir adelante en equipo pese a todo.
Para Castillo, el fútbol es una metáfora de nuestra propia vida, pues siempre estamos luchando, en competencias pero a la vez cooperando con el próximo. Siempre tratamos de salir adelante en equipo pese a todo.
En el libro “Psicología e Impacto Emocional de los Deportes
en los Espectadores” (2001), se mide el poder que puede llegar a tener el
fútbol para aumentar la autoestima de un país.
Hay cinco ideas que refuerzan los efectos del fútbol y de
otras disciplinas deportivas: desde el hecho de ser hincha perteneciente a una
comunidad establecida, el sentido propio de pertenencia que genera una
sensación de bienestar del individuo y del grupo que da identidad; hasta el
lenguaje generacional común capaz de conectar a todas las edades, ser parte de
un espacio seguro donde el miembro puede expresar sus emociones y el hecho de
poder experimentar el éxito de los ganadores, lo cual motiva a decir “si ellos
pueden, yo también”.
En la psicología de masas se resalta el fenómeno del fútbol,
capaz de elevar el autoestima de un país y de generar un sentimiento colectivo
capaz de avanzar incluso frente a las adversidades.
Aparte de todo esto, el ser humano debe expresarse y el
fútbol permite canalizar sentimientos de entusiasmo y alegría ante los
triunfos, pero también de frustración ante las derrotas.
“El fútbol es una terapia social porque nos permite
expresar, sentir y aprender a vivir tanto éxitos como fracasos”, explica el
médico psiquiatra Humberto Castillo. “La expresión de la alegría dinamita la
mente y el cuerpo. Se activan neurotransmisores y hormonas, el lado más
saludable de la gente. Después de una alegría estamos más sanos”.
Esta posibilidad de vivir el disfrute de manera colectiva es
una gran oportunidad de conducir el ánimo de la gente, así como la frustración
también es un gran maestro que aparece en la derrota.
“El fútbol es como una metáfora de la vida, con sus triunfos
y fracasos. La magia de este deporte es que podemos salir rápido de la derrota,
pasar a la expectativa y luego al sueño”.
Finalmente, también es un gran elemento de integración que
permite formar una comunidad y crear identidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario